Bolivia se adentra en la recta final hacia las elecciones generales del 17 de agosto con una maquinaria electoral que ya está en plena marcha. El Tribunal Supremo Electoral (TSE) inició la distribución de más de 7 millones de papeletas y el armado de 34.026 maletas electorales que serán enviadas a 5.727 recintos en todo el país. La impresión del material está prácticamente concluida y el cronograma apunta a completar la entrega en los nueve departamentos hasta el 4 de agosto. También comenzará la distribución internacional para los bolivianos que votarán en 22 países.
En Santa Cruz ya llegaron más de 2.200 cajas con papeletas y material electoral, bajo resguardo de las Fuerzas Armadas. La presidenta del Tribunal Electoral Departamental, Cristina Claros, garantizó que el traslado continuará con protección policial. En La Paz, el TED reportó haber recibido el 60% del material necesario. Cada maleta electoral incluirá listas de votantes habilitados e inhabilitados, ánforas, señalética y papeletas que incorporan cinco medidas de seguridad: tinta invisible, tinta fluorescente, microtexto, patrón guilloché y código QR.
Mientras tanto, 32 observadores de largo plazo de la Unión Europea ya se han desplegado por todo el país tras una capacitación intensiva en La Paz. Antes de las elecciones se sumarán otros 50 observadores de corto plazo y una delegación de siete parlamentarios europeos. En total, la misión europea contará con más de 100 veedores desplegados en todos los departamentos, incluidos representantes diplomáticos de Estados miembros. Su labor abarcará el seguimiento del conteo, el clima político, el discurso digital y el respeto a los derechos humanos.
El Gobierno, por su parte, asegura que la seguridad está garantizada. La viceministra de Seguridad Ciudadana, Carola Arraya, afirmó que las elecciones se desarrollarán bajo un “resguardo absoluto” y conforme a un convenio firmado entre el TSE y la Policía Boliviana. Durante la jornada electoral, el control operativo de las fuerzas del orden pasará al Órgano Electoral Plurinacional, como establece la Ley 026 de Régimen Electoral.
Con el país enfocado en cada detalle logístico y con la atención internacional puesta sobre el proceso, Bolivia se prepara para una votación que definirá al próximo presidente y renovará por completo el Legislativo, en un escenario marcado por la tensión política y la demanda de transparencia.
