El sistema de pagos electrónicos en Bolivia alcanzó un récord histórico con 605 millones de operaciones realizadas hasta mayo de 2025, lo que representa un aumento del 89% respecto al mismo periodo de 2024. Este crecimiento refleja un cambio significativo en los hábitos financieros de la población, con un promedio de 77 transacciones electrónicas por persona, y una proyección de 200 operaciones per cápita para fin de año. La mayoría de estas operaciones corresponden a transferencias electrónicas, destacando los pagos con QR, que representan el 85% del total.
Este avance ha sido posible gracias a las políticas impulsadas por el Banco Central de Bolivia (BCB), que ha promovido la digitalización y la modernización del sistema financiero nacional. La interoperabilidad entre entidades, la incorporación de soluciones como las carteras digitales y la llegada de actores internacionales como PIX de Brasil, han ampliado el ecosistema de pagos, haciéndolo más inclusivo, seguro y eficiente.
Además, el marco normativo vigente, particularmente la Resolución de Directorio N.º 111/2024, ha fortalecido los estándares de seguridad y acceso, y permite la implementación de nuevas tecnologías como los pagos con activos virtuales estables (stablecoins) como el USDT. Estas medidas han permitido la inclusión de zonas rurales y periurbanas, y la participación de entidades no bancarias en el sistema financiero digital.
Gracias a estos logros, Bolivia se posiciona como un referente en la región en cuanto a transformación digital e inclusión financiera. Fue el segundo país de América Latina en alcanzar la interoperabilidad en 2022 y actualmente lidera en la implementación de pagos inmediatos con QR. Esta revolución tecnológica ya forma parte de la vida cotidiana de los bolivianos, proyectando al país como un modelo a seguir en modernización financiera.