A pocos días de las elecciones generales, el Gobierno ha activado un amplio despliegue policial para garantizar que la jornada electoral transcurra sin violencia ni sabotajes. Bajo el nombre “Elecciones en Paz”, el plan se ejecutará en las zonas con mayor riesgo de conflicto, con especial atención al Trópico de Cochabamba, regiones de Santa Cruz y puntos específicos de Potosí.
El ministro de Gobierno, Roberto Ríos, aseguró que la medida responde a la necesidad de preservar la seguridad ciudadana y la integridad del material electoral, descartando versiones sobre un supuesto intento oficialista de frenar los comicios. “Nuestra vocación democrática es incuestionable”, afirmó, destacando el compromiso del presidente Luis Arce con el respeto al voto.
La estrategia incluye la custodia del material electoral desde su traslado hasta su resguardo final, en coordinación con el Tribunal Supremo Electoral, que esta semana tendrá una nueva reunión con las autoridades para cerrar detalles logísticos.
Ríos pidió a las organizaciones que planean movilizarse el día de la votación que depongan sus acciones y permitan que la fecha sea “una verdadera fiesta democrática” para todo el país.