Con la mira puesta en las elecciones generales del 17 de agosto, el Movimiento Al Socialismo (MAS) busca reconstruir puentes con figuras clave de la izquierda que se han distanciado de su línea política en los últimos años. Este lunes, el presidente del partido, Grover García, anunció que se convocará de manera formal a Eva Copa, líder del Movimiento de Renovación Nacional (Morena), y a Andrónico Rodríguez, candidato de Alianza Popular, a una reunión estratégica de alto nivel para explorar la posibilidad de articular un bloque unificado.
“La unidad no es sólo un discurso, es una necesidad. Desde el congreso del MAS hemos planteado que el camino debe ser colectivo. Hay liderazgos valiosos como los de Eva y Andrónico, con quienes ya existieron coordinaciones en el pasado. Hoy, las bases exigen madurez política”, señaló García.
El líder masista recalcó que la invitación será enviada oficialmente y no se limitará a pronunciamientos mediáticos. Según anticipó, en los próximos días se definirá tanto la fecha como el formato del encuentro, que buscará sentar las bases para una alianza que evite la dispersión del voto progresista.
La convocatoria surge en un escenario en el que la izquierda boliviana muestra signos de fragmentación. Eva Copa, con una base sólida en El Alto y proyección nacional, se ha consolidado como una figura autónoma tras su ruptura con el MAS. Andrónico Rodríguez, por su parte, encabeza una nueva plataforma política con respaldo en sectores juveniles y campesinos. Para el MAS, la posibilidad de competir dividido representa un riesgo real frente a un bloque opositor que intenta capitalizar ese quiebre.
Aún no está claro si Copa y Rodríguez responderán positivamente al llamado, pero el gesto del MAS representa un giro en su estrategia: dejar atrás la confrontación interna y abrir espacio a una negociación más pragmática, con el horizonte puesto en recuperar la hegemonía electoral desde la diversidad de la izquierda.